El bocadillo cubano está relleno de cerdo asado durante cuatro horas, jamón cocido, queso emmental, vinagrillos y mostaza, todo encerrado en un panecillo casero aplastado y tostado.

Los tamales son uno de los platillos mexicanos más famosos: rellenos de un guiso de carne de cerdo, con masa casera con manteca y cocinados al vapor.

Hacer hot pot en casa es más simple de lo que pueda parecer, y es una forma de dar de comer a mucha gente en muy poco tiempo. Hacemos la base desde cero, y repasamos todos sus componentes.

Este revuelto de setas, huevo y cerdo tiene otros dos ingredientes muy curiosos: setas oreja de madera y flores de lirio deshidratadas.

Aprende a hacer masa de arepas desde cero, y después a rellenarlas con dos delicias: reina pepiada, una ensaladilla de aguacate y pollo, y rumberas, con cerdo guisado.

Esta burger de pescado frito es 100% casera: con salsa tártara, relish de pepinillos, panecillos japoneses y bacalao frito en tempura, crujiente y jugoso.

La porchetta es un plato italiano barato y muy visual: panceta especiada enrollada, crujiente y aireada por fuera, y muy jugosa por dentro.

Hacer pasta fresca en casa es un proyecto muy guay, pero hacerla rellena es el siguiente paso. Hoy hacemos agnolotti, tortellini y ravioli, con diferentes rellenos.

Las tartas invertidas de fruta son súper sencillas de hacer y dan muy buen resultado: jugosas, sabrosas y preciosas, el único momento tenso es el de darles la vuelta.

El Chili Crab es el plato nacional de Singapur: buey de mar cocinado en una salsa picantona con tomate, chiles y huevo, que se unta con panecillos al vapor.

Döner Kebab completamente desde cero: pan turco esponjoso y sabroso, salsa blanca especiada y cremosa, y carne dorada y jugosa, sin torno, en la sartén.

Los panini son los bocadillos más famosos de italia, con focaccia como pan y rellenos de lo más variados. Hoy hacemos dos: de mortadela y pistacho; y de jamón con pecorino.

Lasaña con pasta fresca de espinacas, ragú boloñesa sabrosón y cremoso, bechamel suave y mucho parmesano. Un clásico, totalmente desde cero.

Las ensaladas tailandesas se dividen en cuatro categorías, y todas son maravillosas, pero mis favoritas son estas dos: Yam Khai Do y Laab Moo Isan, llenas de sabor y textura.

El Banh Mi es mi bocadillo favorito para el verano: de origen vietnamita, es refrescante, con vinagrillos y cilantro; y súper sabroso, con panceta crujiente y paté casero.

Los manti son unos dumplings turcos, muy parecidos a los tortellini italianos, rellenos de ternera y finalizados con yogur y mantequilla infusionada con pimentón.

Este lemon pie es cremoso, refrescante, dulce y con un punto ácido. Con base de pastel americano y merengue tostado, es el postre perfecto para cualquier época del año.

El Shuizhu Niurou es un plato sichuanés muy famoso: ternera hervida en un caldo de pollo con chiles fermentados, ajo y jengibre. Picante, sabroso y súper umami.

La deliciosa y auténtica Tarta Sacher: dos bizcochos compactos de almendra y chocolate, mermelada de albaricoque casera y un frosting de chocolate grueso y cremoso.

Estas berenjenas chinas salteadas con aroma a pescado (Yu Xiang Qie Zi) son uno de los platos más famosos de Sichuan: sabrosas, un poco picantes, y puro umami.