Dos tartas invertidas: de melocotón y de piña
Por todos es conocida la famosísima tarta Tatin, con manzanas caramelizadas, que se cocina invertida en una sartén, y luego se invierte. Y la pregunta es: ¿por qué no hacer lo mismo con otras frutas, y en vez de ponerle masa quebrada, ponerle un bizcocho? El resultado es una tarta jugosa y esponjosa, con fruta caramelizada por encima que queda preciosa y cuya única dificultad es encontrar el valor suficiente para darle la vuelta.
Ambas tartas pueden hacerse o bien en un molde, o bien en una sartén, vamos a hacer cada una en uno, pero son intercambiables. En el caso del molde, mejor que sea demsontable, para que luego sea más fácil sacarla. No es imprescindible, pero muy recomendable, sobre todo si te da tanta ansiedad como a mi el momento volteo, lo hace mucho más sencillo. El mío era de 24 cm, aunque sirve cualquiera entre 20 y 26 cm.
La tarta invertida más famosa de Estados Unidos es la de piña, es un clásico de los 80-90, algo así como la San Marcos en España, yo creo. Esta receta de Claire Saffitz le da una vuelta un poco más sofisticada añadiéndole mantequilla tostada y ron, que la hace una tarta adulta y potente, perfecta para merendar, o para cualquier momento del día en el que quieras un golpecito de alegría.
DIFICULTAD: INTERMEDIA - INGREDIENTES: FÁCIL - TIEMPO: 1 HORA
TIEMPO ACTIVO: 30 MINS - CANTIDAD: 8 PORCIONES
INGREDIENTES
- TARTA DE MELOCOTÓN
4 melocotones
Mantequilla
Papel vegetal
100 g de azúcar blanco
60 ml de agua
Bizcocho:
125 g de harina de trigo
3 g de levadura química
Nuez moscada rallada al gusto
Pizca de sal
125 g de mantequilla sin sal
150 g de azúcar
2 huevos (L)
Sirope simple:
50 g de azúcar
50 ml de agua
Ralladura de lima
- TARTA DE PIÑA
Piña caramelizada:
1 piña
60 g de mantequilla
100 g de azúcar moreno
60 ml de ron (sustituibles por agua)
Pizca de sal
Bizcocho:
225 g de harina de trigo
2 g de levadura química
3 g de sal
3 g de canela
2 g de bicarbonato
175 g de mantequilla
125 g de azúcar moreno
2 huevos
200 g de creme fraîche (o yogur, o crema agria)
45 ml de ron (sustituibles por agua)
Sirope simple:
50 g de azúcar
50 ml de agua
MÉTODO
- TARTA INVERTIDA DE MELOCOTÓN
Deshuesa y corta los melocotones en gajos de medio centímetro de grosor.
Engrasa el molde desmontable, forra la base con papel vegetal, vuelve a engrasarlo y coloca los gajos formando un patrón.
En una sartén, añade el azúcar el agua. Mézclalo y llévalo a ebullición. Caramelízalo sobre fuego medio-alto durante 5 minutos más, o hasta que adquiera color ámbar profundo. Vierte el caramelo por encima del melocotón en el molde y resérvalo.
Para el bizcocho, en un bol mediano añade la harina, la levadura quimica, la nuez moscada y la sal. Mezcla y reserva.
En un bol grande, añade la mantequilla sin sal con textura de pomada y el azúcar, y bate con unas varillas hasta que sea cremosa.
Incorpora los huevos 1 a 1, y finalmente los ingredientes secos en dos tandas, finalizando el mezclado con una espátula.
Extiende la masa de bizcocho por encima del melocotón y hornea a 180 grados durante 30 minutos, calor solo por abajo.
Deja que el molde se enfríe 5 minuto, y después quita las paredes. Coloca un plato encima e invierte la tarta.
Pasa un cuchillo entre el papel y el molde y quita la base. Después, despacio, quita el papel vegetal.
Deja que enfríe, y opcionalmente, limpia los melocotones de bizcocho con una puntilla.
Opcionalmente, finaliza la tarta barnizándola con el sirope simple, y con ralladura de lima.
- TARTA INVERTIDA DE PIÑA
Tuesta la mantequilla para el bizcocho en una sartén, dejando que se derrita sobre fuego medio y cocinándola hasta que espume y adquiera color tostado. Transfiérela a un bol y déjala enfriar.
Pela y corta la piña en rodajas, y después quítales el corazón con un cortador de galletas.
En una sartén, añade la mantequilla, el azúcar moreno, el ron y la pizca de sal. Mezcla y enciende fuego medio, y llévalo a ebullición. Redúcelo hasta que sea espeso y cree espuma, y entonces añade seis o siete rodajas de la piña, las que quepan en la sartén. Póchalas en el caramelo durante 10-15 minutos, hasta que hayan reducido su tamaño sustancialmente y el caramelo haya vuelto a espesarse. Retira la sartén del fuego y deja que se enfríe completamente.
Mientras, prepara el bizcocho: en un bol mediano mezcla la harina, la levadura química, la sal, la canela y el bicarbonato. Mezcla y reserva.
En el bol grande de la mantequilla tostada ya enfriada, añade el azúcar moreno y bate con unas varillas hasta que doble su volumen y adquiera un color más pálido.
Incorpora los huevos uno detrás del otro, y después la creme fraîche y el ron. Mezcla.
Incorpora los ingredientes secos, y finaliza el mezclado con una espátula.
Extiende la masa de bizcocho sobre la piña caramelizada y mete la sartén a un horno a 180 grados durante 15 minutos, hasta que se haya dorado y un palillo insertado en el centro salga limpio.
Deja que la sartén se enfríe 15 minutos, y después separa las paredes con un cuchillo. Invierte la sartén en una rejilla y déjala enfriar totalmente, un par de horas,
Opcionalmente, finalízala con un barnizado de sirope simple para que brille más.
Esta deliciosa tarta tiene dos bizcochos de chocolate y café jugosos y tiernos, praliné y crumble de avellanas caseros y cremoso de mascarpone.