Tres clásicos de restaurante chino: arroz tres delicias, pollo con almendras y ensalada china, con ese vinagre blanco misterioso pero delicioso.

Estas tres recetas son típicas de restaurante chino y las puedes hacer en casa no solo iguales, sino muchísimo mejores, ahorrándote dinero y dándote felicidad.

No hace falta tener un horno de piedra profesional en casa para hacer pizza napolitana auténtica: basta con una sartén y un horno normal y corriente.

Esta boloñesa italoamericana hecha a fuego lento está deliciosa y es muy fácil de hacer. Va perfecta con unos pappardelle hechos a mano.

Tres recetas de croquetas gourmet maravillosas, con bechamel cremosa y rebozado crujiente: pollo al curry, gambas y de risotto (arancini).

Pocas cosas más reconfortantes hay que un bol de sopa de cebolla caliente. Esta receta es fácil, rápida y deliciosa, y además muy parecida a la tradicional.

Pocos platos tan elegantes hay como el Solomillo Wellington: deliciosa ternera embadurnada en mostaza y envuelta en jamón, duxelles de setas y hojaldre.

Estos baos son preciosos y deliciosos, crujientes y picantes y con unos panecillos caseros ligeros, delicados y esponjosos. La combinación de texturas perfecta.

Deliciosa pasta mezclada con una cremosa salsa de quesos cheddar, gruyère y parmesano, y finalizada con pan rallado y mantequilla gratinada.

La Kiki, la famosa hamburguesa de pollo del Goiko Grill, es una maravilla de burger. Hacerla en casa es fácil, y sale igual, o mejor.

La legendaria lasaña del GoXO de Dabiz Muñoz se puede hacer en casa, con un guiso con sabores indios, bechamel de leche de coco y pasta fresca.

Estas alitas de pollo tienen una doble fritura para que estén extra crujientes, y van cubiertas de una salsa agri-picante de chiles coreana.

Aprende cómo hacer los nuggets más jugosos, sabrosos y crujientes que jamás hayas probado. Son muy sencillos, y van de maravilla con una salsa BBQ casera.

Es un plato que ha conquistado al mundo: el IKEA se ha encargado de que las albóndigas suecas le gusten a todo el mundo, y así es como se hacen.

Las baguettes son unas de las barras de pan más difíciles de hacer en casa, pero el resultado es maravilloso: miga esponjosa y corteza crujiente.

El pollo frito del KFC es delicioso, pero muchas veces es demasiado graso y blandurrio. Hacerlo en casa te lo garantiza crujiente, jugoso y sabroso.

Este pollo frito es prácticamente gourmet: una carne jugosa y tierna puesta en salmuera, frita dos veces para garantizar una cobertura absurdamente crujiente.

Los ñoquis de patata son la pasta más fácil y rápida de hacer en casa, no requieren equipamiento especial, y salen esponjosos como una nube.

Es un plato tremendamente sencillo de hacer: pescado fresco acompañado de leche de tigre, cítrica y fresca; y se hace en 15 minutos.

La shakshuka es un plato árabe muy sencillo que consiste en huevos escalfados cocinados en salsa de tomate especiada. Se hace en 25 minutos y está delicioso.