Tarta de queso de chocolate
Todos tenemos esos días en los que nos apetece básicamente bañarnos en chocolate, comernos toda la estantería de dulces del supermercado, atracar la tienda de chuches y morir de sobredosis de azúcar. Y para esos días tan señalados e importantes en el ciclo de la salud mental personal, os traigo el antojo perfecto: una cheesecake de chocolate, con corteza de Oreo.
Si, sabe igual que suena: una bomba de dulce que satisfará tus necesidades de azúcar más exigentes, y que además queda tremendamente foodporn. Las Oreo son unas de mis galletas preferidas, y por eso las elegí para la corteza, pero puedes sustituirlas por cualquier otra galleta, o hacer una versión más sofisticada, como la que hicimos en la tarta de lima.
Mi recomendación es que la dejes enfriar en la nevera totalmente una vez pongas la cobertura, esto es, por lo menos 4 horas, para que todo se asiente, ya que con el chocolate derretido puede resultar demasiado empalagosa. De todas formas, si quieres ese efecto de chocolate cayendo por el centro al cortarla, déjala enfriar solamente 20 minutos.
DIFICULTAD: FÁCIL - INGREDIENTES: FÁCIL - TIEMPO: 1 HORA Y MEDIA
TIEMPO ACTIVO: 30 MINS - CANTIDAD: 8 PORCIONES
INGREDIENTES
- TARTA DE QUESO DE CHOCOLATE
24 oreos
70 g de mantequilla
300 g de chocolate (70% cacao o más)
60 ml de café (o leche entera)
600 g de queso crema
200 g de azúcar
15 ml de extracto de vainilla
4 huevos
30 gramos de cualquier harina
60 g de chocolate y 70 g de nata para montar (cobertura)
MÉTODO
- CHEESECAKE DE CHOCOLATE
En un procesador de alimentos, tritura las galletas hasta que sean polvo.
Añade la mantequilla derretida, y vuelve a procesar hasta que tenga textura de arena mojada.
Transfiere la mezcla a un molde desmontable de 20 a 25 cm de diámetro, y expándelo homogéneamente, creando un borde de unos 2 cm de alto.
Mételo a un horno a 180 grados, sin grill, durante 8 minutos.
Sácalo y déjalo enfriar completamente a temperatura ambiente.
En un bol, añade el chocolate cortado en trozos y el café caliente. Déjalo reposar 30 segundos y después mezcla hasta que todo el chocolate se haya derretido. Resérvalo.
En un bol grande, añade el queso crema. Bátelo con unas varillas hasta que esté cremoso.
Añade el azúcar y continua batiendo hasta que sea una mezcla cremosa y sin grumos.
Añade la sal, el extracto de vainilla y los huevos, incorporando cada uno con el resto de la mezcla antes de echar el siguiente.
Añade la harina de tu elección. Mezcla.
Añade el ganache de chocolate y café, y mezcla hasta que sea homogéneo.
Transfiere la mezcla al molde con la corteza de oreos fría.
Pon una fuente con agua en la parte inferior de un horno precalentado a 165 grados.
Introduce el molde con las cheesecake en el horno y hornea durante 20 minutos.
Baja la temperatura a 150 grados y hornea durante 30 minutos adicionales.
Saca la tarta y déjala en el molde.
En un bol, mezcla el chocolate y la nata. Mételo al microondas a mitad de potencia hasta que se derrita, y después emulsiónalo.
Vierte el ganache por encima de la tarta, aún en el molde. Extiéndelo con una espátula.
Refrigera la tarta un mínimo de 20 minutos (para efecto chocolate derretido) o 4 horas para que se asiente completamente.
Saca la tarta del molde, corta y finaliza con pistachos machacados.
Esta deliciosa tarta tiene dos bizcochos de chocolate y café jugosos y tiernos, praliné y crumble de avellanas caseros y cremoso de mascarpone.