Donuts caseros: esponjosos y sin horno
Una taza de café y un donut al lado, pocas cosas más bonitas se me ocurren un lunes por la mañana, no hay forma mejor de empezar la semana. Y ya si ese donut es completamente casero, esponjoso, dulce y delicado, entonces ya solo queda volverse a la cama, porque la semana no va a mejorar mucho más.
Lo más maravilloso de los donuts es que no necesitan horno, ya que la masa se fríe en vez de hornearse. Tengo una receta similar a esta de los famosos bombolini italianos, que son básicamente donuts rellenos, échale un ojo.
Los glaseados que les pongas a los donuts son completamente personalizables, e incluso puedes no ponerle ninguno si quieres un donut para untar en el café. Mi favorito, eso si, es el glaseado clásico, de azúcar y leche, fino y crujiente.
DIFICULTAD: INTERMEDIA - INGREDIENTES: DIFÍCIL - TIEMPO: 3 HORAS Y MEDIA
TIEMPO ACTIVO: 1 HORA - CANTIDAD: 15 DONUTS
INGREDIENTES
- DONUTS
240 ml de leche
15 g de levadura fresca (o 5 g de levadura instantánea, o 4 g de levadura seca de panadero)
560 g de harina
40 g de azúcar
6 g de sal
20 g de azúcar moreno
2 huevos
115 g d mantequilla derretida
Aceite neutral
- GLASEADO CLÁSICO
200 g de azúcar glas
Chorrito de leche
- GLASEADO DE CHOCOLATE
175 g de azúcar glas
25 g de cacao en polvo
Agua
MÉTODO
- DONUTS
Disuelve la levadura fresca en la leche templada. Resérvalo.
En un bol grande, añade la harina de trigo, el azúcar, la sal y el azúcar moreno. Mezcla.
Transfiere la mitad de la mezcla a otro bol.
Bate dos huevos y añádelos a uno de los boles, junto a la leche con levadura y la mantequilla derretida, pero no caliente. Incorpora todos los ingredientes.
Añade la otra mitad de harina e incorpora todo de nuevo.
Transfiere la masa a una superficie de trabajo y amasa de 8 a 10 minutos, o hasta que sea lisa y elástica.
Transfiere la masa a un bol enharinado, cúbrela con un trapo húmedo, y déjala reposar de 1 a 2 horas, o hasta que haya doblado su tamaño.
Saca la masa a una superficie y estírala con un rodillo hasta que tenga 1 cm de grosor.
Corta círculos de 8 cm de diámetro más o menos. Reamasa las sobras, estíralas y corta más donuts.
Haz los agujeros centrales con un cortador de galletas de 2 cm y medio.
Transfiere los donuts y sus agujeros a una bandeja cubierta con papel vegetal. Déjalos levar 45 minutos, o hasta que doblen su tamaño, cubiertos con un trapo húmedo.
Fríe los donuts en aceite de girasol a 180 grados, unos 2 o 3 minutos por cada lado, o hasta que estén dorados.
Saca los donuts a una rejilla y déjalos enfriar completamente.
En un bol, mezcla el azúcar glas y el cacao en polvo. Añade agua poco a poco hasta que tenga textura líquida pero espesa. Resérvalo.
En un bol, añade el azúcar glas y un chorrito de leche entera. Mezcla y añade leche hasta que tenga textura líquida pero espesa. Resérvalo.
Unta los donuts en los glaseados y déjalos enfriar completamente en la nevera, durante al menos 15 minutos, o hasta que se solidifiquen los glaseados.