Crumble y cobbler, los postres británicos por excelencia
La cocina británica no es la que mejor fama tiene en todo el mundo, pero cuenta con algunas joyas maravillosas, y en su mayoría son postres. El crumble y el cobbler son dos conceptos tremendamente similares: harina de trigo con mantequilla tostados encima de fruta asada en el horno, lo que crea un maravilloso contraste de texturas, sabores y temperaturas, ya que normalmente se sirve caliente al lado de un par de bolas de helado.
La diferencia entre el crumble y el cobbler es que el primero es una versión más rustica, sin formar y simplemente espolvoreado por encima de la fruta; y el cobbler se forma en pequeñas bolas que le dan una presentación más elaborada, pero además otra textura diferente.
Cuál escojas, es totalmente tu elección, ambos son maravillosos. Lo bueno del crumble, eso si, es que puedes tenerlo congelado, preparado para echarlo por encima de un poco de fruta, meterlo al horno, y tener un postre maravilloso listo en muy poco tiempo. La fruta que elijas es totalmente tu elección, y en el crumble puedes añadir o sustraer todos los ingredientes que quieras, los únicos imprescindibles son la harina, la mantequilla y el azúcar.
DIFICULTAD: FÁCIL - INGREDIENTES: FÁCIL - TIEMPO: CRUMBLE: 1 H / COBBLER: 1H 30M
TIEMPO ACTIVO: CRUMBLE: 20M / COBBLER: 35M - CANTIDAD: 6 RACIONES
INGREDIENTES
- CRUMBLE (MASA)
250 g de harina (cualquier tipo)
125 g de mantequilla fría
100 gramos de azúcar blanco
50 gramos de azúcar moreno
50 gramos de avellanas
50 gramos de copos de avena
- CRUMBLE (RELLENO)
50 gramos de azúcar blanco
300 gramos de frutos del bosque (congelados o frescos)
15 gramos de maicena
Zumo de media naranja
Un poco de agua
- COBBLER (MASA)
140 g de harina de trigo
30 g de azúcar
9 g de levadura química
Pizca de sal
Ralladura de medio limón
60 g de mantequilla
25 g de mantequilla derretida
Azúcar moreno para finalizar
- COBBLER (RELLENO)
140 g de harina de trigo
30 g de azúcar
9 g de levadura química
Pizca de sal
Ralladura de medio limón
60 g de mantequilla
25 g de mantequilla derretida
Azúcar moreno para finalizar
MÉTODO
- CRUMBLE
En un bol añadimos la harina, el azúcar blanco y el azúcar moreno. Mezcla todo.
Añade la mantequilla recién sacada de la nevera y cortada en cubos. Rebózala en la harina y desmigájala con los dedos, hasta que el trozo más grande sea del tamaño de un guisante y tenga textura de arena mojada.
Machaca las almendras y añádelas al bol, junto a los copos de avena. Mezcla y reserva en la nevera.
Echa un dedo de agua en un cazo y añade el azúcar, los frutos del bosque, el zumo de naranja y la maicena. Ponlo sobre fuego medio alto y llévalo a ebullición.
Transfiere el relleno al recipiente apto para horno de tu elección y cúbrelo con el crumble.
Mete el bol a un horno a 180 grados, sin grill, durante 30 minutos, o hasta que esté profundamente tostado.
Deja que se enfríe 10 minutos y emplata al lado de dos bolas de helado de limón.
- COBBLER
En un bol añade la harina, el azúcar blanco, la levadura química, la sal y la ralladura de limón. Mezcla.
Añade la mantequilla recién sacada de la nevera y cortada en cubos. Rebózala en la harina y desmigájala con los dedos, hasta que el trozo más grande sea del tamaño de un guisante y tenga textura de arena mojada.
En un bol pequeño mezcla la nata para montar fría y el extracto de vainilla. Mézclalo.
Añade la nata poco a poco a los ingredientes secos, humedeciendo toda la harina uniformemente.
Transfiere la masa a una superficie ligeramente enharinada y estírala hasta que tengas un cuadrado de 15x15.
Corta la masa en 4 cuadrados iguales, pon uno encima del otro y vuelve a estirarlo hasta que tenga un grosor de 1 cm.
Corta las galletas con un cortador de galletas de 4 cm de diámetro. Resérvalas en la nevera.
Deshuesa todas las cerezas con una pajita de metal. Transfiérelas al recipiente apto para horno de tu elección.
Espolvorea por encima el azúcar blanco, la maicena, el zumo de limón, la canela molida, el extracto de vainilla y la sal. Mezcla todo y después coloca las galletas por encima, intentando que queden lo más pegadas posibles.
Derrite un poco de mantequilla y barniza todas las galletas, y después espolvorea por encima azúcar moreno.
Mete el cobbler a un horno a 200 grados, sin grill, durante 10 minutos.
Baja la temperatura a 170 grados y déjalo hornear 50 minutos más.
Déjalo enfriar 10 minutos.
Sirve con dos bolas de helado de vainilla.
